La estimación es probablemente la más antigua técnica «de medición». La
experiencia se ha utilizado siempre como base para predecir acontecimientos
futuros. Normalmente, sin embargo, las estimaciones simples son demasiado poco
fiables para ser utilizadas como base de una planificación y un control eficaces.
La precisión de las estimaciones depende de la experiencia del estimador en la
esfera en que esté actuando. Las técnicas de estimación estructurada son un intento
de tener en cuenta este hecho y al mismo tiempo de imponer una estructura y una
disciplina sobre el proceso de estimación con el fin de que los resultados obtenidos
puedan tratarse con confianza.
Las ventajas de la estimación son que:
□ es barata y por consiguiente, puede ser la única técnica adecuada para los
trabajos no realizados en serie;
□ puede utilizarse para predecir tiempos de un trabajo que no se ha observado
y, en consecuencia, como base para calcular el precio de grandes trabajos
únicos (no realizados en serie).
Normalmente se recurre a la estimación cuando los valores del tiempo
necesario no tienen que ser muy detallados. Por esa razón, esas técnicas son útiles
en el trabajo de ciclo largo y en situaciones en que se emplean datos de medición
globales para la planificación, el control o el pago durante períodos de tiempo
razonablemente extensos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario