Existen modificaciones a este principio. Para un ensamble que involucra el levantamiento de partes
pesadas, representa una gran ventaja bajar la superficie de trabajo 8 pulgadas (20 cm) para utilizar
los músculos más fuertes del tronco (vea la fi gura 5.5). En el caso de un ensamble fino que involucra
detalles visuales muy pequeños, resulta de gran utilidad elevar la superficie de trabajo 8 pulgadas (20
cm) para acercar los detalles a la línea de vista óptima de 15° (principio del capítulo 4). Otra alternativa,
probablemente mejor, es inclinar la superficie de trabajo aproximadamente 15°, y así cumplir con
ambos principios. Sin embargo, las piezas redondas tenderán a rodar sobre la superficie.
Estos principios también se aplican a una estación de trabajo fija. Un gran número de tareas,
como la escritura y el ensamble, se pueden llevar a cabo de una mejor manera a la altura de descanso
del codo. Si la tarea requiere la percepción del detalle fino, puede ser necesario elevar el trabajo para
acercarlo a los ojos. Las estaciones de trabajo fijas deben contar con asientos y descansa pies ajustables
(vea la figura 5.6). De forma ideal, después de que el operador se haya sentado cómodamente
con ambos pies sobre el piso, la superficie de trabajo se coloca a la altura del codo adecuada para realizar
la operación. Por lo tanto, la estación de trabajo también debe ser ajustable. Los operadores de baja estatura cuyos pies no alcancen el piso, aun después de haber ajustado la silla, deben utilizar
un descansa pies con el fin de proporcionar un soporte para sus extremidades inferiores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario